No es ficción, es la cruda realidad. La película cuenta la historia real de uno de los grupos étnicos más primitivos del planeta: los pigmeos Baka. Veremos como la tala indiscriminada de árboles por parte de las compañías madereras está destruyendo su hábitat.
Los animales que cazaban han huido, han aparecido nuevas enfermedades, y lo que es peor, los ancianos han dejado de soñar. Estos ancianos consumen iboga, un potente alucingeno que les transporta al mundo de los espíritus. El espíritu de “el Señor de la Jungla”, los gorilas, les dicen que deben hacer. Organizados en varios clanes, 200 pigmeos luchan por la supervivencia, teniendo que emigrar a lugares más remotos dentro de la jungla.